Parece ser que se pusieron de acuerdo y montaron un carnaval en el mes de Noviembre. Una se disfrazó de gatito, otra de mariposa, la de más allá de señor con barba, otra lleva un antifaz, y aquella parece un chino mandarín … pero no, no,… no nos dejamos engañar: es la fiesta de los pensamientos (Viola x wittrockiana). 

Intento saber porque se llaman «pensamientos» y no encuentro respuesta.   Se dice que cada color del pensamiento o viola tiene un significado distinto. La blanca representa al ‘candor’; la violeta es ‘modestia’; tres colores juntos llama al ‘recuerdo’, de ahi que en algunos paises sea conocido como ‘nomeolvides’ o «flor del recuerdo». No sé, quizás cuando recuerdas estás pensando,  y de ahí lo de «pensamiento».  Sea como sea,  sus flores alegres y divertidas, sus mil y un disfraces nos hacen sonreír en pleno invierno, porque además no temen al frío y amanecen espectaculares en balcones y parterres.  El pensamiento no deja de florecer durante todo el invierno, llegando a su esplendor a finales de esta estación. Existen muchas variedades de pensamientos, unos con grandes flores, otros con flores medianas y la Viola de flores pequeñas y delicadas que presenta un porte más compacto. La gran gama de colores y flores que existen, hace que sea una planta perfecta para realizar multitud de combinaciones, tanto utilizando exclusivamente pensamientos, como en conjunto con otras plantas.  Es una planta anual, que morirá al llegar el calor, pero su precio más que asequible la hace una de las indispensables en los balcones y jardines de invierno.

Le gusta el sol directo, riego frecuente y un abono de floración.  Si retiramos las flores marchitas cortando el tallo muy abajo, florecerá más y mejor.

 

 

Un abrazo.